Alimentación saludable, derecho al que todos
deberíamos tener acceso.
(Ensayo)
Introducción.
El derecho a la
alimentación de cada uno de nosotros, está reconocido en la Declaración
Universal de Derechos Humanos desde 1948, pero, que tantos de nosotros
conocemos, sabemos o lo vivimos, que la alimentación no está garantizada del
todo. Esto porque empíricamente es así; muchos factores nos impiden contar
con una alimentación y mucho menos una
alimentación saludable y equilibrada, que nos brinde todos los nutrientes para
evitar enfermedades, y para garantizar una vida larga y plena. Los factores,
los riesgos y la inseguridad en términos de una mala alimentación, nos invita a
reflexionar sobre un derecho primordial y que no debe dejarse a un lado dada su
importancia en nuestra calidad de vida, por ello, conozcamos el problema a
fondo, y las posibles soluciones al mismo.
Alimentación
saludable.
Definamos en principio, que es la alimentación saludable?
Una Alimentación saludable es aquella que aporta todos
los nutrientes esenciales y la energía que cada persona necesita para
mantenerse sana. En base a ello, podemos
concretar que alguien que está bien alimentado, tiene mejores oportunidades de
vivir con plena salud, protegerse de enfermedades, desarrollarse plenamente y a
aprender y trabajar mejor. De ello, depende nuestro bienestar y futuro, no es
casualidad que este estipulado en los derechos humanos, para ser precisos, en
el derecho humano número veinticinco que
dice: “derecho a la alimentación,
vestido, vivienda”, pero profundicemos un poco sobre ello: ¿De qué manera
se ha buscado garantizar este derecho primordial? Si observamos a nuestro
alrededor el mundo está lleno de carencias, estas carencias son, en su mayoría
esenciales para existir, por ello, el derecho a la alimentación es un derecho
humano, pero las estadísticas indican que las enfermedades que causan más
muertes en todo el mundo están relacionadas con enfermedades provocadas por la
mala alimentación, como el cáncer y la diabetes.
Pero lo más triste de esta situación es la afectación
terrible a la población infantil, ya que, según la OMS, en todo el mundo hay
aproximadamente 165 millones de niños con retraso de crecimiento a causa de la
escasez de alimentos, de una dieta pobre de vitamina A y minerales, que
repercuten en la capacidad de aprendizaje de los menores. Y no es casualidad
que las tasas de crecimiento de estos tipos de niños se den en su mayoría en
África y Asía, afectando en el Este de África al 42 % de los niños en 2011.
Estos datos nos indican la falta de políticas para atender el problema del
derecho humano a la alimentación, ya sin decir, al acceder a una alimentación saludable que
incluya los nutrimentos necesarios para un buen desarrollo, alimentos que
contengan los macronutrientes, que son indispensables para un buen
funcionamiento de nuestro cuerpo que son los carbohidratos, grasas y proteínas,
y lo mictronutrientes que son las vitaminas y minerales que necesitamos en
menor cantidad, pero que son necesarias
para el buen funcionamiento de nuestras células. Pero los factores de una mala
alimentación, atiende a situaciones como la falta de un buen ingreso económico
en las familias más pobres, la falta de
conocimiento nutricional en la población y la falta de regulación en los
alimentos chatarra y si nos fijamos bien, todos estos factores los debería
garantizar el gobierno de cada uno de los países en el mundo, pero, ¿Qué ocurre con los gobiernos encargados de
garantizar el empleo, la salud y castigar a los que la dañan? Sencillamente no
lo respetan, ya que si lo respetarán y cumplieran, existirían promociones de la
seguridad alimentaria, políticas para ejercer este derecho, y basarían su
gobierno desde un enfoque de los derechos humanos como principal estrategia
para garantizarlos. Por lo que en conclusión podemos determinar que para
garantizar una alimentación saludable en todo el mundo, sin importar
situaciones económicas, políticas y sociales, se deben establecer programas a
nivel mundial, en los que se busque la garantía plena de este derecho, mediante
la promoción de los alimentos saludables y no los de la comida chatarra, programas
de autosuficiencia alimentaria, como realizar cursos de capacitación entre la
población para realizar huertos urbanos, incentivar a los pequeños ganaderos y
agricultores para que brinden calidad y precio a los consumidores y brindar
servicio nutricional en cualquier institución de salud de gobierno, para que
toda la población tenga acceso a información y a una dieta equilibrada mediante
un profesional del campo. Y todo ello, pudiera hasta cierto punto garantizar a
todas las personas del mundo una alimentación saludable, que garantizará un
desarrollo óptimo y completo, libre de enfermedades a causa de la mala
alimentación.
Referencias:
Organización de las Naciones Unidas para la agricultura y
la alimentación. (s.f) “El derecho a la alimentación en la práctica”.
PDF, Consultado el 5 noviembre del 2016, de: http://www.fao.org/docrep/016/ah189s/ah189s.pdf
Departamento de agricultura (s.f). Capitulo 9: Macronutrientes: carbohidratos,
grasas y proteínas. Consultado el 5
noviembre del 2016, de : http://www.fao.org/docrep/006/w0073s/w0073s0d.htm
Organización mundial de la Salud. (10 febrero 2012) 10 Datos sobre la nutrición. Consultado el
5 noviembre del 2016, de: http://www.who.int/features/factfiles/nutrition/es/
(s.a) (27 agosto del 2015) Características de los derechos humanos / cuales son. Consultado
el 5 noviembre del 2016, de: http://caracteristicas.org/derechos-humanos/
Ministerio de la Salud, Presidencia de la Nación. (s.f) Alimentación saludable. Consultado el 5 noviembre del 2016, de: http://www.msal.gob.ar/ent/index.php/informacion-para-ciudadanos/alimentacion-saludable
Amnistía Internacional. Artículo 25. Derecho a un nivel de vida digno. Consultado el 5
noviembre del 2016, de: http://www.amnistiacatalunya.org/edu/material/dudh/es/dh25.html
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